BANKIA
–antiguamente llamada Caja Madrid –
–antiguamente llamada Caja Madrid –
( CAJA, CAJA. NO LLEGA A BANCO )
Relato de Ficción o quizás no tanto
El día 9 de
Noviembre de 2011.
Disfrute de una tarde ajetreada, intensa, sorprendente y
todo ello gracias a:
BANKIA (antiguamente llamada Caja
Madrid).
Esta entidad, decidió establecer una barrera de salida para
que no pueda cancelar la cuenta que poseo con ellos en su red de oficinas, con
facilidad.
Según Caja Madrid tengo que cancelar la
C.C en la oficina, en la que se abrí la Cuenta Corriente
(C.C.).
En ese momento me
alegro, de no haber abierto La C.C
en China.
El proceso fue el siguiente:
Decidía trasladar mi escuálido capital al DeutchBank –DB-
(por trato, servicio, profesionalidad, etc.).
Para conseguir esto. Hable con el Banco (DB).
Le pregunté si para cancelar una cuenta en DB, hay que irse
la oficina en la que se abrió la cuenta. Me dijo que naturalmente no.
Riéndose, me dijo. Estamos hablando de una entidad del siglo XX.
El periplo por BANKIA (antiguamente llamada Caja Madrid), fue el siguiente:
OFICINA PROXIMA A MI DOMICILIO.
1) Voy a la oficina más próxima a mi casa y una individua
situada detrás de una mesa. Mira de soslayo mi aspecto personal (voy en
vaqueros, con camisa casual).
En su foro interno, la trabajadora debe pensar algo, aunque
no sé exactamente el que.
El caso es, que cuando le digo que quiero cancelar la
cuenta.
Me dice que no me puede ayudar.
No me gustan mucho sus palabras, porque yo no busco
ayuda.
Yo quiero cancelar una cuenta.
Cuando, le digo que no entiendo su modelo de negocio y que
no entiendo a su vez porque establecen barreras de salida.
Me dice que ella sabe mucho de modelos de negocio y que mire
la pantalla de su ordenador que no puede cancelar la cuenta.
Le digo que no tengo interés en mirar la pantalla y que a parte
no estoy nada, pero nada interesado, en conocer sus procedimientos internos.
Empiezo a pensar lo siguiente:
1) La individua de BANKIA
(antiguamente llamada Caja Madrid)
, sigue observando mi vestimenta y me dice que la máxima ayuda que me
puede prestar es:
Solicitar una cancelación de la cuenta (Empiezo a pensar.
Que BANKIA (antiguamente llamada Caja Madrid)
tiene un palomar y que va a enviar
una paloma mensajera con mi solicitud de cancelación de cuenta en el pico). Veo
claramente que no puedo estar interesado en ese tipo de servicios.
2) Creo que BANKIA (antiguamente
llamada Caja Madrid) esta
segmentado sus clientes hacía 2
perfiles:
2.1) Individuos poco formado e informados con un capital en C.C
permanente superior a 2.000 €.
2.2) Individuos que necesiten una
nutrida red de cajeros from Spain.
Esta claro que no pertenezco a ninguno de esos grupos.
Salgo de la entidad, con un fuerte dolor de cabeza. Me han
dejado muy, pero que muy impresionado.
Pero yo sé, que este tipo de cajas siempre tiende a dar un plus.
OFICINA EN LA QUE ABRI LA Cuenta Corriente (C.C).
Voy a la entidad en la que abrí la cuenta.
Evidentemente se encuentra muy alejada de mi domicilio actual.
1) Un individuo, me mira de reojo. Ve mis vaqueros y mi
camisa casual.
Creo que no le he impresionado.
Le digo que quiero anular mi C.C con ellos.
Me dice este trabajador de Bankia (antigua Caja Madrid), que le facilite la tarjeta, la libreta (cuanta caspa) y el DNI.
Le doy todo lo que me pide.
Dice que sí, que me va a anular la C.C.
Que si quiero anular la tarjeta de debito asociada a mi C.C.
Le digo, me parece perfecto. Pero si eres tan amable y como
el Mundo cada vez esta peor. Haz el favor de cortarla y darme un trozo.
Me mira, se pone algo nervioso y me facilita el trozo de
tarjeta que tiene el chip.
Posteriormente y siguiendo, entiendo las normas de calidad y
buen servicio de Bankia (antigua Caja Madrid).
Me dice que la anulación la tengo que hacer en la caja.
Miró detrás y veo una densa cola de personas esperando para
hacer sus gestiones. Y pienso hoy va a ser un día duro. Veo que claramente BANKIA (antiguamente llamada Caja Madrid) quiere que pase
toda la tarde con ellos.
Aunque no tengo nada claro el
motivo. ¿ Quieren iniciar una nueva amistad?.
La verdad, no creo que sea un
comportamiento propio de profesionales.
Entiendo claramente que los
trabajadores. Sólo están aplicando los procedimientos realizados por
Directivos.
Pero no me parece muy inteligente
la postura adoptada por estos directivos. Entiéndase, esto es una opinión
personal y quizás pueda estar equivocado.
En ningún momento NADIE me PREGUNTA porque quiero abandonar la ENTIDAD.
Cosa que NO me sorprende, porque llegado a este punto. Me
empiezo a hacer una idea del tipo de servicios que presta Bankia (antigua Caja Madrid).
En este momento. Me han convencido. Tengo que anularlo, como
sea. Aunque tenga que pasar la noche en esta maravillosa ENTIDAD, llamada Bankia (antigua
Caja Madrid).
Mientras hago cola para llegar al CAJERO. Veo las fotos de
aquellas personas que han perdido sus casas por la funesta crisis económica y
me produce una profunda tristeza, ver los bienes de otras personas ofrecidos al
mejor postor.
Pienso en los anuncios de
BANKIA de labor social, y no entiendo nada.
Este es otro
argumento para irme.
Pero una entidad de estas características está muy
interesada en que disfrutes durante la tarde y me ofrece otra sorpresa de su
estilo.
Me dice el trabajador de BANKIA
(antiguamente llamada Caja Madrid) , que está como cajero que la
anulación de la cuenta tiene un coste.
Llegado a este punto.
Me da igual el coste,
se que me va a salir barato.
By Octavio Ignacio Ruiz Ruiz Email: oirmab@gmail.com
Estimado Octavio:
ResponderEliminarSirva este comentario a tu publicación como una adenda al anecdotario referido a esta, en su día entrañable hoy prescindible, entidad financiera llamada BANKIA (como tu dices antes conocida como Caja de Madrid).
Necesidades crediticias de liquidez para la adquisición de materia fungible para mi humilde despacho profesional acudí a una sucursal cercana al mismo.
Mi condición de miembro de la Asamblea General en representación del sector de entidades representativa de interese colectivos (Una Fundación), me permite el solicitar un préstamo en condiciones, a priori, más beneficiosas que como un simple impositor.
Mi primera sorpresa fue que el amable, por que realmente lo era, trabajador desconocía la existencia de dicho órgano en la entidad. Amablemente le explique a modo de símil la equivalencia de dicho órgano a una Junta General de Accionistas, y le indique la existencia en el portal de la entidad un acceso a dicha información:
ASAMBLEA GENERAL
· Corporaciones Municipales
· Impositores de la Caja
· El Patronato Real, como Entidad fundadora de la Caja
· Asamblea de Madrid
· Empleados de la Caja
· Entidades representativas
He de reconocer que mi labor pedagógica causo buenos efectos, el trabajador se preocupo por conocer para quien trabajaba, más allá de sus compañeros de oficina y su director al frente, conclusión a la que llegue por que mientras hacia las simulaciones de mi solicitud de crédito (15 días con sus días y sus noches) debió empaparse al respecto por la demostración de la que fui testigo cuando me dio cita para hacerme sabedor de sus simulaciones financieras (10 días más con sus días y sus noches, para una operación de alto riesgo: capital solicitado 3.000 euros.
La sorpresa es que, como indiqué en párrafo anterior, los “a priori” no son buenos comienzos, y al comparar las condiciones de simulación de opción A mero impositor con B humilde miembro de la Asamblea el resultado es que el anonimato a veces es la mejor presentación.
He de reconocer que el crédito había desaparecido de mis prioridades ya que en el breve lapso de tiempo que transcurrió desde mi primera visita justificada y la última ya más por curiosidad, pude facturar uno cuantos servicios profesionales que solucionaron mi particular apalancamiento finaciero.
Tengo otras de carácter judicial que deja bien a las claras el estricto cumplimiento de sus principios fundadores:
“CAJA MADRID tiene su origen en el Monte de Piedad de Madrid, fundado por el sacerdote aragonés Francisco Piquer el 3 de diciembre de 1702. Su finalidad inicial fue atender las demandas de las clases sociales más necesitadas de protección, a través de la concesión de préstamos gratuitos, garantizados con alhajas y ropas, e intentando con ello suavizar los abusos de la usura.”
Esta claro que fue en sus principios más principios.
Un fuerte abrazo